Cuatro años han pasado desde el último Mortal Kombat. Como secuela de Mortal Kombat X, Mortal Kombat 11 tenía que superarlo y así lo hizo. Mortal Kombat ha vuelto más sangriento que nunca.

Tomando muchos elementos de Injustice 2, Mortal Kombat 11 es una experiencia nunca antes vista en otro juego de la saga. Las mecánicas de combate han sido pulidas a detalle, el sistema de personalización ha sido implementado casi a la perfección y la historia es un interesante movida argumental.

Siendo una entrega de NetherRealm Studios, lo menos que se espera son violentos e increíbles combates, y por supuesto que no ha decepcionado, siendo Mortal Kombat 11 la combinación perfecta entre las mecánicas de combate de Mortal Kombat X y algunas de Injustice 2. El combate se siente fluido, no pesado, es entretenido cuando debe serlo, y difícil y desesperante también cuando se requiere. Los personajes, muy variados, están todos equilibrados y más aún con las variantes personalizadas. Los Fatalities y los Brutalities tampoco pueden fallar y aunque algunos son flojos, la mayoría están muy bien realizados y recuerdan mucho la violencia característica de la saga.

El sistema de variantes personalizadas es una importantísima adición al universo de Mortal Kombat, puesto que el argumento del juego permite personalizar a los personajes de maneras variadas. La personalización de tres elementos del personaje, su aspecto y sus habilidades son una innovación acertada que vuelve el juego más propio de los jugadores, que pueden utilizar a sus personajes favoritos con sus habilidades favoritas y no dependen de la programación del juego.

Las Torres están de vuelta, y similar a los Multiversos de Injustice 2, nos ofrecen la posibilidad de luchar con combatientes de distintas eras y ganar recompensas y accesorios de personalización para nuestros personajes. Sin embargo, algunas Torres contienen «modificadores» similares a los vistos en Injustice 2, estos modificadores generalmente dañan la experiencia del combate, volviendo tedioso y hasta insoportable. La adición de los konsumibles es un factor innecesario, que da ventaja a los jugadores ante el gigantesco desequilibrio que provocan los modificadores desbalanceados.
También tenemos el regreso de la Kripta, que tiene una renovación también, se convierte en un minijuego similar a la Kripta de Mortal Kombat X pero en tercera persona y muchísimo más interactiva. Obtener todos los ítems que se encuentran esparcidos por la Kripta necesita mucho tiempo y esfuerzo para obtener el oro necesario, lo que obliga a los jugadores a jugar los diversos modos de juego que ofrece.
El multijugador nunca está ausente, y es importante destacar que tampoco se ausenta el multijugador local, sin embargo conserva el «error» de Injustice 2 de no compartir la personalización entre usuarios de una misma consola, obligando al segundo jugador a jugar con personajes sin personalizar.
Un aspecto para aplaudir es el hecho de que todo se puede obtener jugando (a excepción de los incentivos de pre-orden).
El roster es importante, Mortal Kombat 11 tiene guerreros de distintas eras. Una combinación entre la vieja escuela y la nueva, dando como resultado un maravilloso roster de lo más variado, con tres personajes nuevos, unos que regresan del juego anterior y otros que estuvieron ausentes mucho tiempo.

El soundtrack está acorde a la esencia del juego. Es un espectáculo auditivo, en los menús y en los kombates.
La historia no es un cliché de viajes temporales. La trama se siente como si hubiera sido planeada desde Mortal Kombat (2011), una salvación para la historia de la saga. Los personajes muestran una enorme evolución, Johnny Cage principalmente, aunque también Sub-Zero y Scorpion. Las Fuerzas Especiales pasan a ser relegadas a un segundo plano ahora que los Campeones de la Tierra originales están de regreso.

Ahora bien, el peor error del juego es la necesidad de estar permanentemente conectado a internet. Mortal Kombat 11 no se puede jugar si no está conectado a internet. A diferencia de Injustice 2, que podía jugarse sin conexión (excepto partidas online, obviamente), Mortal Kombat 11 requiere conexión permanente para acceder a las Torres (del Tiempo y las Klásicas), a la Kripta, ¡y a la Personalización! Un verdadero y auténtico fiasco.
Dicho todo lo anterior, y considerando que el juego está bastante bien pulido en mayoría de los aspectos, tanto en jugabilidad como visualmente, es tiempo de veredicto final.
Puntos positivos:
• Buena jugabilidad, intensos y divertidos combates.
• Roster espectacular, muy variado. La combinación perfecta entre la vieja escuela y la nueva escuela.
• Variantes personalizadas, una adición muy acertada.
• La Kripta es mucho más interactiva y obliga al jugador a esforzarse.
• Argumento interesante, con escenas épicas y nostálgicas para los jugadores veteranos de la saga.
• Increíbles Fatalities y Brutalities, y el regreso de los Mercy.
Puntos negativos:
• Modificadores demasiado desbalanceados que dañan por completo la experiencia.
• Las luchadoras ahora tienen un enfoque más «mesurado y maduro», mostrando muchísima menos piel ante reclamos de «machismo». Es lo que pasa cuando se escuchan quejas de personas que nunca en su vida han jugado Mortal Kombat, arruinan la experiencia de los jugadores reales.
• Solamente seis personajes DLC.
• Tediosa conexión permanente a internet.
Calificación final:
